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La importancia de la atención psicológica en la lucha contra el coronavirus

La labor de los psicólogos del cuerpo italiano de ayuda de la Orden de Malta
La importancia de la atención psicológica en la lucha contra el coronavirus
02/04/2020

La emergencia sociosanitaria provocada por la pandemia de covid-19 tiene consecuencias psicológicas con miles de facetas, muchas de ellas inéditas, a pesar de que la psicología de emergencias es un ámbito ya bien explorado. Desde hace dos semanas, los psicólogos del cuerpo italiano de ayuda de la Orden de Malta (CISOM) trabajan en varias regiones de Italia; «tenemos aproximadamente cuarenta en primera línea», confirma Pierluigi Policastro, responsable nacional de los psicólogos del CISOM.

¿Cómo funciona su trabajo?

Nuestro trabajo, que desarrollamos en coordinación con la Protección Civil italiana, la Cruz Roja y otras asociaciones de psicología de emergencia, se articula en dos grandes frentes: la interna y la externa. La atención externa se presta a las personas en cuarentena por haber dado positivo en coronavirus, o en aislamiento preventivo por haber estado en contacto con personas contagiadas. En paralelo, hemos lanzado una labor de asistencia interna, dirigida a los operadores: médicos, enfermeros y voluntarios de la Orden de Malta que luchan en primera línea contra la pandemia. Además, algunas asociaciones profesionales nos han pedido que colaboremos en el servicio de atención telefónica que han activado: trabajamos con el centro de coordinación del colegio profesional de psicólogos en las regiones de Liguria y Lombardía, con el centro de coordinación regional de grandes emergencias de Toscana y también con algunos pequeños municipios de Salerno que han solicitado apoyo psicológico.

¿Con qué instrumentos?

Por desgracia solo podemos usar el teléfono, porque debemos proteger a nuestros psicólogos voluntarios. Cualquier intervención de otro tipo sería imposible.

¿Cuáles son las características de esta emergencia?

La crisis de la covid-19 tiene características propias, completamente atípicas, porque por primera vez los mismos trabajadores, profesionales o voluntarios, deben también enfrentarse a la emergencia en sus propias familias, de manera personal. Nosotros mismos nos vemos afectados, al lado de quienes atendemos. En cuanto a la población, también debemos pensar en la situación de los curados. Se han curado, sí, pero son personas devastadas. Probablemente hayan pasado días encamados, al lado de otros enfermos que no han sobrevivido. Han estado solos, sin tener la compañía de sus seres queridos, sin compartir ni tan siquiera un lamento. Finalmente, no debemos olvidar la importancia y el profundo significado, para gestionar el sufrimiento, del aspecto ritual y simbólico.

¿Qué consejos se pueden dar?

Estamos frente a una nueva tipología de intervención, para la que es necesario reflexionar sobre la importancia del apoyo psicológico, ahora y en el futuro. Debemos ayudar a las personas a considerar este momento como una etapa evolutiva. A nosotros no nos interesa mitigar los síntomas, como hace un médico frente a una neumonía intersticial. Nosotros intervenimos en un momento posterior, estamos en una escucha activa e intentamos introducir elementos psico educativos. Para ello hemos elaborado también una serie de documentos que se pueden encontrar en el sitio web del cuerpo de ayuda italiano de la Orden de Malta, entre otros un vademécum dirigido justamente a los operadores sanitarios y de protección civil: https://www.cisom.org/news-2/covid-19-indicazioni-per-il-benessere-psicologico-degli-operatori-sanitari-e-di-protezione-civile/

Siempre hablando de la lucha contra la pandemia de covid-19, el Global Fund for Forgotten People de la Orden de Malta ha liberado fondos para realizar y gestionar una plataforma digital que permitirá a los psicólogos del CISOM interactuar a distancia con los beneficiarios. Esta plataforma permitirá organizar también sesiones de grupo para trabajar los sentimientos de soledad, ansiedad y estrés, y estará disponible 24 horas al día, además de una línea telefónica de ayuda. Esta iniciativa se pondrá a disposición de los voluntarios y los trabajadores directamente implicados en las actividades de ayuda, además de todo aquel que sufre por causa del virus, las personas en cuarentena o aisladas y sus familias.