Mientras la pandemia de la covid-19 sigue afectando a la comunidad internacional y las desigualdades y divisiones se hacen cada vez más visibles en detrimento de los más vulnerables, el sistema económico y social de los Estados se pone en tela de juicio. En este contexto alarmante, la Santa Sede y la misión permanente de la Soberana Orden de Malta ante Naciones Unidas en Ginebra han organizado un evento virtual de alto nivel llamado Fraternidad, multilateralismo y paz para presentar la encíclica Fratelli Tutti del Papa Francisco en las Naciones Unidas.

La videoconferencia, celebrada el jueves 15 de abril, se ha dividido en dos paneles de 45 minutos, cada uno sobre cuestiones específicas. La primera sesión se ha centrado en la fraternidad y la paz a escala multilateral, y a ella ha asistido el cardenal secretario de Estado Pietro Parolin y altos responsables de ACNUR, la OIT, la OMS y el Comité Internacional de la Cruz Roja.

La segunda sesión, moderada por el embajador de la Soberana Orden de Malta ante las Naciones Unidas en Ginebra, Marie-Thérèse Pictet-Althann, ha estudiado cómo puede el diálogo interreligioso promover una cultura de diálogo, paz y justicia social, desde la perspectiva de la fraternidad humana.

Ha abierto el debate el cardenal Miguel Ángel Ayuso Guixot, presidente del Consejo Pontificio para el Diálogo Interreligioso, junto al príncipe El Hassan bin Talal. «Pretendemos estudiar el ideal de la fraternidad humana desde la perspectiva del diálogo interreligioso y la justicia social. De hecho, cabe preguntarse cómo están conectados estos tres elementos y cómo contribuyen a reforzar el mensaje de la encíclica Fratelli Tutti. El diálogo interreligioso supone la comprensión de las propias creencias e identidad y de los valores compartidos, para que pueda establecerse un diálogo productivo que se traduzca en resultados concretos que ayuden a la justicia social», ha explicado Marie-Thérèse3 Pictet-Althann.