El 11 de septiembre se ha celebrado en Roma la segunda conferencia de la Soberana Orden de Malta dedicada al cuerpo diplomático africano, en la sede gubernamental de la Villa Magistral. Unos 40 embajadores y diplomáticos, en representación de otros tantos Estados africanos, han participado en esta conferencia, celebrada pocos días después del Día de la Unión Africana, que conmemora el nacimiento de la Unión Africana.

De los 54 miembros de la Unión Africana, 38 son países con los que la Orden de Malta mantiene relaciones diplomáticas. Además de los embajadores acreditados ante la Orden, han asistido a esta segunda conferencia dedicada al continente africano algunos embajadores de Estados con los que la Orden de Malta no mantiene relaciones diplomáticas en el continente.

En su discurso ante los embajadores, el Gran Canciller Riccardo Paternò di Montecupo ha recordado las características y los objetivos de la diplomacia de la Orden: «En el caso de la Orden de Malta, cuya neutralidad es uno de sus principios fundacionales, las actividades diplomáticas y humanitarias están estrechamente entrelazadas, ya que ambas tienen como objetivo promover la paz y el bienestar».

«Los diplomáticos trabajan para garantizar que la ayuda humanitaria pueda acceder a las zonas en crisis y para proteger a los trabajadores humanitarios dándoles protección política, a veces colaborando con los actores locales y otras veces con sus propios recursos», ha señalado el Gran Canciller. Riccardo Paternò di Montecupo también ha recordado el doble papel que desempeñan los embajadores de la Orden de Malta: el institucional, destinado a organizar esa «diplomacia silenciosa» característica de la Orden de Malta, que a menudo tiene lugar discretamente y entre bastidores, y otro más operativo, que implica las iniciativas sobre el terreno de apoyo a la población local.

Activa en 35 países africanos, la Orden de Malta gestiona, a través de Ordre de Malte France y de Malteser International, su organización de ayuda internacional, hospitales, centros médicos y ambulatorios que prestan atención sanitaria primaria y de emergencia, y desarrollan proyectos permanentes de apoyo psicosocial. Las instalaciones de la Orden también atienden a pacientes seropositivos y a enfermos de malaria y tuberculosis. Muchos de los hospitales y clínicas de la Orden están especializados en atención materno-infantil. Malteser International participa especialmente en la ayuda a personas afectadas por catástrofes y guerras, y tiene también intervenciones de recuperación después de desastres. Son igualmente numerosas las iniciativas de rehabilitación de infraestructuras, de sistemas de abastecimiento de agua, los proyectos de sostenibilidad y de reducción del riesgo de catástrofes.

La conferencia ha sido la ocasión de exponer los primeros proyectos financiados por el OMDP (Orden de Malta – Donantes para Proyectos) en Namibia y Marruecos, y ha permitido reafirmar el compromiso de la Orden de Malta en la lucha contra el fenómeno de las «falsas órdenes».