Soberana y Militar Orden
Hospitalaria de San Juan de
Jerusalén de Rodas y de Malta

News

Zofia Bogdan, de 104 años, condecorada por la Orden de Malta por su valor en la guerra

Primera polaca en recibir la Medalla de Oro al Mérito de la Orden de Malta, la Sra. Bogdan es la última enfermera superviviente del hospital que la Orden de Malta tuvo en Varsovia durante la Segunda Guerra Mundial. Un testimonio vivo de valor frente al terror.
Zofia Bogdan, de 104 años, condecorada por la Orden de Malta por su valor en la guerra
04/06/2025

En 1939, cuando las bombas caían sobre Varsovia y la ciudad se preparaba para hacer frente a la invasión alemana, una joven de 18 años llamada Zofia Słowikowska atravesó el caos y entró en el Hospital Militar Polaco de la Orden de Malta, en la calle Senatorska. No buscaba seguridad: estaba allí para ayudar.

Ochenta y cinco años después, esa misma mujer – hoy la Sra. Zofia Bogdan, de 104 años – ha sido condecorada con la Medalla de Oro pro Merito Melitensi, el más alto honor de la Orden de Malta por los actos de valor y servicio realizados mientras ponía su propia vida en peligro. En una ceremonia solemne dirigida por el conde Jacek Tarnowski, presidente de la Asociación polaca de la Orden, la señora Bogdan ha sido la primera persona de Polonia en recibir este importante honor.

La suya es una historia de resiliencia, heroísmo silencioso y devoción por los que sufren. Durante la Segunda Guerra Mundial, Zofia trabajó como enfermera en el hospital de la Orden, atendió a las víctimas del terror nazi y participó en los esfuerzos de resistencia bajo el seudónimo de «Zojda». Hoy es la última enfermera viva de aquel histórico hospital y uno de los últimos testigos de la Varsovia de los tiempos de guerra.

Durante esa época, no sólo atendió a los heridos durante el brutal Levantamiento de Varsovia, sino que también formó a otras enfermeras y participó en operaciones de resistencia clandestinas, incluido el histórico intento de recuperar el edificio PASTA (la compañía telefónica polaca).

Al final del levantamiento, ella y el personal del hospital fueron evacuados a un campo hospitalario en los terrenos de una fábrica a las afueras de Varsovia, donde los alemanes instalaron un centro secundario del campo Durchgangslager 121. Escapó a la deportación gracias a la intervención de la familia de su prometido. Después de la guerra, la Sra. Bogdan mantuvo el contacto con sus colegas del hospital, médicos y enfermeras, recordando el ambiente único de fraternidad y valentía y preservando la memoria de la misión de misericordia de la Orden de Malta en la Varsovia de la guerra.

La entrega de la medalla de oro por parte del presidente Tarnowski no ha sido sólo un reconocimiento al heroísmo del pasado, sino un profundo acto de recuerdo: un homenaje a una mujer que lo arriesgó todo para salvar a los demás y que, incluso un siglo después, sigue siendo una fuente de inspiración.